Para los fanáticos del rock pesado, esta es una noticia desalentadora, aunque no necesariamente inesperada. Ozzy Osbourne, miembro fundador de la banda creadora del heavy metal, Black Sabbath, acaba de declarar que, como mucho, le queda una década de vida por delante y afirmó que si su salud se deteriora aún más de lo que lo ha hecho, ase someterá a una muerte asistida.
Así lo reveló en un perfil acerca de “El Príncipe de las Tinieblas” publicada por la versión británica de la revista Rolling Stone.
En el artículo, contó que recientemente su esposa, Sharon Osbourne, lo retó al pillarlo fumándose un pito de marihuana, y que en ese momento él respondió: “¡¿Cuánto tiempo quieres que viva?! En el mejor de los casos, me quedan 10 años y cuando eres mayor, el tiempo se acelera”.
El músico de 74 años dijo, además, que no teme morir y tiene un pacto de suicidio asistido con su mujer. “Me gusta la idea de que si tienes una enfermedad terminal, puedes ir a un lugar en Suiza y ‘curarte’ rápidamente. Vi a mi padre morir de cáncer”, señaló, indicando que no quiere tener “una existencia larga, dolorosa y miserable”.
Un sobreviviente
Lo cierto es que la salud de Ozzy es actualmente muy delicada. Al músico le diagnosticaron la enfermedad de Parkinson en 2003, pero fue recién en 2020 que reveló que padecía este trastorno progresivo del sistema nervioso. Además, ha sido sometido a varias cirugías de columna y le encontraron un tumor en una de las vértebras que lo han dejado prácticamente lisiado.
Por otro lado, dado su larguísimo historial de abusos con el alcohol y las substancias, es de hecho un sobreviviente. Algo que el propio rockero reconoce, ya que en la publicación señaló que esperaba estar muerto hace años y, sin embargo, está desconcertado porque han sido sus amigos los que han fallecido.
“¿Por qué soy el último hombre en pie? No entiendo nada de eso”, comentó. “A veces me miro al espejo y digo: ‘¡¿Por qué carajo lo lograste?!’ No estoy alardeando de nada de eso, porque debería haber estado muerto mil veces”, añadió.
Pese a todo, le dijo a Rolling Stone UK que le gustaría actuar para sus fieles seguidores por última vez. “Esa es una de las cosas por las que he estado más cabreado: nunca tuve la oportunidad de decir adiós o agradecer”, manifestó el legendario intérprete de “Iron Man”.