Una de las actrices más queridas por el público chileno es sin duda María Elena Swett. La actriz se encuentra actualmente en Chile, grabando las escenas que se desarrollan en nuestro país, de la coproducción con Telemundo, y nueva nocturna de TVN: “Dueños del paraíso”. En una amena conversación, Mane comenta estar feliz con su personaje y aclara también, las acusaciones de divismo a las que se vio enfrentada semanas atrás.
Cuéntanos un poco sobre tu personaje
Mi personaje es Vanessa Esparza. Soy la hermana de Mario (Tiago) y soy una azafata de una aerolínea chilena, específicamente jefa de cabina. Su novio está metido en el narcotráfico de cocaína y empieza a utilizar el trabajo de ella para poder llevar la droga a USA; esos son los primeros pasos de la llegada de la cocaína allá. Y bueno, a ella este tema le empieza a agradar, le gusta esto de que comienza a ganar plata. Ella es una mujer muy ambiciosa y como le empieza a resultar, comienza a contagiar a otras chicas para que se incluyan a este negocio. Como te digo, es un personaje muy movido por la ambición, pero también por un tema de que le ha costado mucho llegar a donde está.
¿Es Vanessa el link que une la historia de Chile con Miami?
Bueno, la historia se empieza a juntar desde antes, pero lo que junta la venida a Chile de estos personajes efectivamente es Vanessa. Es ella la primera en viajar para allá y empezar a conectar la historia de todos estos personajes.
Antes de comenzar, comenzaron a surgir estos rumores de que te habían despedido, de que te quitaron un personaje, de que eras diva ¿cómo enfrentaste estos rumores? ¿Te importaron? ¿Hiciste oídos sordos?
Me importa, por supuesto. Me importa porque en primer lugar yo siento que la gente me quiere y se preocupa. Segundo porque siento que la atención de mi trabajo se desvía. Pero por otro lado también soy de la idea de que aclarar situaciones equivocadas solamente agranda el tema. Para mí lo más fácil sería responder y desmentir muchas cosas, pero siento que eso da pie para seguir hablando y siento que mi mayor mecanismo de cuidarme y de defensa es el silencio. Ahora por otro lado también yo estaba allá (Miami) así que no lo viví tan en carne propia. Me contaron lo que salió; nunca vi nada, nunca salió nada, nunca dimensioné hasta donde llegó. Espero que no haya sido mucho porque no vale la pena; creo que mi manera de aportar en eso fue mantenerme en silencio para que no creciera la bola.
¿Cómo ha sido el proceso de adaptarse a Miami?
Me ha encantado. Me ha gustado mucho; ha sido lo complejo que puede ser cualquier cambio de casa, el instalarse, etc. Mi hijo se ha adaptado rápidamente, ya está en su colegio, tiene sus compañeritos, sus amigos nuevos: Además mantengo conexión con Chile siempre. Pero en general ha sido un súper buen cambio y como sé que no es permanente, no me asusta en nada.
¿Y si te ofrecieran quedarte?
…Podríamos conversarlo (risas).
Vimos que esta teleserie es de mucha acción, ¿te veremos también peleando o manejando armas?
No me ha tocado todavía disparar. Pero en todo caso Vanessa es un personaje que sería capaz de hacerlo, o sea es más peligrosa que mono con navaja. Como no mide el peligro y no sabe usar un arma, podría causar incluso aún más daño. Es una mina muy… pero muy peligrosa.