La noche de ayer se estrenó «Tierra Brava» por las pantallas de Canal 13. Con un exitoso comienzo, el nuevo reality de la señal de Luksic conquistó a la audiencia con las primeras competencias para definir quiénes habitarán los espacios de la finca. Su animador, Sergio Lagos, entregó sus primeras impresiones sobre estos desafíos y la casa-estudio.
En el episodio de estreno, luego que Karla Constant presentara a los 14 participantes que comenzarían a vivir la experiencia en este nuevo programa se vinieron las competencias con las que se definió qué equipo estaría en el lado con comodidades de la casa.
Primera competencia
El primer desafío que tuvieron que realizar los participantes de «Tierra Brava» comenzó con la entrega de sus teléfonos móviles para entrar a alta mar en un yate y lanzarse al agua y nadar, con chalecos salvavidas hasta una balsa con una llama.
Como prueba grupal, debieron llevar esa balsa hasta las orillas de la playa y ahí tomaron una antorcha y la encendieron, en señal del espíritu de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023, los cuales serán transmitidos por Canal 13 a partir de las próximas semanas.
Aunque ese gran desafío colectivo no fue fácil, en especial para los que temían al agua o simplemente no sabían nadar, como Pamela Díaz, Camila Arismendi o Miguelito, por ejemplo, finalmente todos cumplieron el objetivo y gracias a eso se aseguraron tener luz, agua y fuego en la casa-hacienda. Ese era el premio que ofrecía la prueba.
Sobre esa primera prueba, su conductor Sergio Lagos señaló que «lo de Punta Sal fue una experiencia con características épicas. Fue bien lindo el lugar, un paraíso latinoamericano, pero desconcertante todo lo que tuvieron que vivir los participantes».
«Y eso fue solo el arranque. Por ejemplo, gente que tenía fobia y tuvo que dejar atrás eso. Miguelito dijo durante días que él no iba a entrar al agua ni soñando y todos tuvieron que lanzarse al mar» agregó el periodista.
Impresiones de la casa
De igual forma, Sergio Lagos entregó sus impresiones de la casa-estudio: «Yo viviría claramente en el espacio del bienestar, donde la camita es agradable y donde la almohada es esponjosa. Definitivamente yo lucharía hasta las últimas consecuencias para asegurarme la estadía en un lugar más confortable».
En cuanto a las áreas sin privilegios, indicó que «es complejo el tema de la ducha en el sector sin privilegios, pero es un lugar hermoso y nos da nuevas posibilidades para hacer cosas, conversaciones y acciones varias».
Por último, Lagos comentó que «la casa es distinta a todo lo que habíamos visto y tiene una identidad que, por supuesto, está dispuesta para que la vayamos construyendo. Me parece un punto de arranque extraordinario y nos permite soñar… y eso es lo que hemos venido a hacer, soñar y soñar capítulo a capítulo»
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