El actor y político hizo un repaso por toda su carrera en teleseries durante una entrevista con Impacto en el Rostro: fue parte de la producción más vista en la era del people meter, «Amores de Mercado»; pero también de una historia que, literalmente, nunca logró despegar.
Luciano Cruz-Coke se refirió a «Charly Tango», vespertina de Canal 13, donde interpretó a Álvaro, un piloto de avión. «El personaje me encantaba, pero la teleserie era mala, mala, mala. Mi personaje era un mamón que vivía tratando de demostrarle a su madre que él podía más. Su mamá era la Gaby Hernández, esplendida actriz, graciosa, llena de cuentos, una mujer liberal, que tiene muchas historias», declaró.
Sus dardos apuntan directamente hacia el guion de Jorge Maestro, quien no logró dar forma a la idea presentada por Fernando Aragón y Arnaldo Madrid. «La teleserie era tan mala, que había que estar arreglando permanentemente el libreto. Una pena, porque el pobre Felipe Braun, que era el protagonista, que hacía de ciego, lo pasó mal. Y todos lo pasamos mal, si al final cuando a la teleserie le va mal y el libreto es más o menos (…) Dedito para abajo para ‘Charly Tango’. Malita», sentenció.
La baja sintonía de la teleserie, la menos vista en la historia de Canal 13 hasta ese entonces, ocasiona que sea trasladada del horario de las 20:00 a las 18:30 horas. «Eso pasó en un momento cuando comenzó la parrilla flexible, que apuntaba mucho a la lógica del rating, que puede ser un buen instrumento para medir, pero no para programar, porque los productos comienzan a perder calidad y lo único que buscan es producir impactos, aumentando la violencia o la sexualidad. Y no es un juicio moralista, pero tú puedes tener contenido de mayor calidad que finalmente vaya construyendo público y eso pasa cuando tienes buenas producciones», manifiesta Cruz-Coke.
El candidato a senador por la Región Metropolitana finalmente hace una reflexión sobre la televisión actual recordando que «cuando Alberto Gesswein le dio por impulsar ‘Los 80’, nadie le tenía fe, entonces a veces ha faltado audacia y ése ha sido el gran problema de la televisión chilena. De repente pasan cosas inesperadas, como ‘Los 80’ ‘Amores De Mercado’ o ‘Machos’. De repente le pegan el palo al gato, pero para eso debes ser audaz y tener un poquito de capacidad de arriesgar, porque una televisión que opera sobre seguro, con productos que van más o menos a funcionar, nunca descolla».
