Kevin Felgueras fue uno de los últimos en sumarse al equipo del «Buenos Días A Todos«, dejando atrás una década en el departamento de Prensa cubriendo política y el Congreso. De cara a lo que se viene desde este mes de marzo, el periodista conversó con Fotech.cl sobre sus desafíos en el horario matinal, también se refirió a la relación que mantiene con sus compañeros, dando cuenta de un WhatsApp que tiene con Eduardo Fuentes y Simón Oliveros. Además, reveló uno de sus principales sueños en TV: animar el Festival de Viña.
¿Cómo fue este cambio de la política al matinal?
Cuando estudié periodismo dije ‘yo voy a hacer de todo, menos política’. Dicho eso, estuve diez años haciend opolítica y llegó un momento en que dije ‘hay que cambiar, hay que pensar en los sueños’, y mi sueño es animar el Festival de Viña. Entonces, estaba difícil quedarme dentro del Congreso para poder hacerlo, así que toqué todas las puertas posibles y el matinal me abrió las puertas y los brazos, y el equipo es maravilloso. Ha sido un cambio, no te digo que fácil, es súper difícil cambiar el chip de ser un periodista tan serio, cuadrado, a ser un poquito más suelto. Igual yo estoy a cargo de la parte informativa, entonces ha sido una linda transición y estamos caminando hacia ese sueño y si no, por último, estamos caminando para allá.
Igual los políticos son faranduleros…
Todos. O sea, perdón, pero cubrir política es lo más parecido a «SQP», pero con terno. Es mucho de esa farándula y, además, es donde se toman las decisiones más importantes. Lo entretenido, sí, es que el contacto no se pierde, mñas o menos dos o tres veces a la semana les estoy escribiendo ‘no se olviden de mí, los estoy vigilando, me estoy metiendo en los proyectos de ley’. Ese rol de periodista que buscaba con lupa los detalles, sigue estando dentro de mí.
Me decías que tu sueño es animar el Festival…
De hecho, ahora que estoy en el matinal es un sueño hiper lejano, pero los sueños se van construyendo. Uno siempre tiene que caminar hacia eso, lo logre o no, pero sigue estando ahí dentro de mi ADN. Además, Viña es mi ciudad, el Festival lo veo desde chico. Si algún día lo logro, voy a poder decir que partí ahí arriba haciendo esa fila en la galería con mi hermano y mi mamá. El sueño sigue intacto y esperemos algún día cumplirlo.
Martín Cárcamo era de Viña, Pancho Saavedra partió en «Alfombra Roja». O sea, ¿por qué no?
Esa es mi ley motiv: el por qué no, si las cosas se pueden hacer. Ojalá se cumpla e insisto, uno no se tiene que frustrar cuando las cosas no se dan, uno tiene que caminar, uno tiene que esforzarse. El camino es largo, es complicado, hay muchas vallas, escollos que sortear, pero uno tiene que darle con todo. Hay que confiar en uno mismo y en ese proceso estoy, así que de a poquito confiando.
¿Cómo ha sido llegar a trabajar con dos figuras como María Luisa Godoy y Eduardo Fuentes e instalarte en este panel con un equipo consolidado?
La verdad que son unos dinosaurios de las comunicaciones, Eduardo más que María Luisa por lo viejo… Jajaja, no mentira. A Eduardo lo adoro con el alma, pudimos compartir en la Radio ADN cuando trabajábamos los dos allá. Yo siempre quise mucho a Eduardo, me gusta su humor, su estilo de animación, entonces lo miraba como un referente. De hecho, él lo sabe, cuando estudiaba Periodismo fui a entrevistarlo un día a Canal 13 y fue muy entretenido ahora ser colegas. Con María Luisa un contacto y fiato maravilloso, ella partió en política, reporteó La Moneda, así que hay una complicidad con ambos de una manera muy distinta. ¿Les puedo contar una infidencia? Con Eduardo tenemos un humor muy parecido, él lo saca a relucir, yo soy un poquito más serio al aire, pero tenemos un humor muy parecido y con Simón (Oliveros) también. Eduardo creó hace un par de semanas un grupo de WhatsApp, estamos solo nosotros tres, se llama «DiCaprio», no porque nos parezcamos, sino porque en una película hace un gesto y nosotros hacemos un gesto cada vez que algo nos parece interesante y lo pueden escuchar al aire, nos da lo mismo. Ayer Eduardo nos mandó un mensaje a la 01:51 de la mañana, ese grupo tiene material de sobra y ojalá no nos roben los celulares porque nos echan. Mucho sticker, sobre todo de Simón desnudo. Es un alto grupo de WhatsApp y con eso se demuestra que el fiato no es solo en pantalla, lo que se refleja en pantalla es mucho de lo que vivimos todos los días.
¿Qué están preparando para el «Buenos Días a Todos», pensando que está en el cuarto lugar y que se viene marzo?
La verdad es que estamos trabajando muy duro. Desde el 1 de enero estamos pensando en marzo, estamos trabajando en hacer mucho reportaje de investigación, estamos potenciando mucho nuestro WhatsApp que son las denuncias. Queremos hacer una televisión responsable, una televisión pública que esté al servicio de la gente. Pero sobre todo el poder conectar con las historias. La gente es la que necesita verse reflejada en pantalla y el «Buenos Días a Todos» quiere, con la buena onda y simpatía, entregar momentos buenos, pero también llegar a ese público que se siente dejado de lado. Nosotros no queremos pontificar desde un estrado, vamos a tener los pies en la calle, escucharlos a ellos y empatizar con cada cosa que les pase. El matinal, si bien es súper difícil, es un programa de cinco horas, pero estamos teniendo… Insisto en el concepto: algo muy responsable, pero muy ciudadano. Así que los invito a todos para que puedan conectarse con nosotros y a escribirnos a nuestras redes sociales. Hay muchas denuncian que no salen en la tele y nosotros ayudamos, no nos interesa hacer un show de todo, pero es súper bueno que se puedan contactar con nosotros.