El actor interpreta a Matías en la teleserie nocturna de Mega, quien por su condición sexual recibió una golpiza que lo tuvo internado por la gravedad de sus heridas. Esto, además, provocó que el joven decidiera salir del clóset ante su familia, generando diversas reacciones. En entrevista con Fotech.cl abordó la controversia de su personaje y cómo se viene la trama, una vez que ha revelado su condición ante los Falco.
Ignacio, hace pocos días se emitió la escena de la golpiza que te dieron por ser gay y que fue inspirada en lo que le ocurrió a Daniel Zamudio, siendo ampliamente comentada en las redes sociales y la prensa. ¿Cómo has visto tú la reacción de la gente?
Sí, he salido poco a la calle pero los comentarios en redes han sido hartos. En el fondo hay muchas confesiones de gente que ha pasado por la misma situación, algunos que me han contado efectivamente que le han revelado a sus papás la verdad, otros que tiene miedo, pero en general oscila en ese lugar, en el ‘gracias por mostrar esa libertad’, en el fondo.
La golpiza provoca que Matías le tenga que confesar a sus papás que es gay. ¿Qué se viene ahora para Matías? Finalmente esa confesión fue una liberación para él.
Sí, lo que conté hace un tiempo era que en el fondo iba a pasar por un evento que iba a permitir que él revelara su verdad y desde ese lugar ir desentrañando hacia fuera lo que permanece oculto. En ese sentido toma un rol importante con lo que pasa ahora con los papás, por ejemplo. Por la tensión que existe con ellos, el amante de mi mamá, etc. Entonces entra un poco a querer revelar todas esas verdades que permanecen ocultas, que no quieren dar a luz y que no permiten que la familia pueda realizarse en su propia felicidad.
Ahora que ya pudo declarar su sexualidad, ¿cómo va a tomar la noticia el resto de la familia?
La teleserie va a mostrar el contraste que aún existe, una tensión a nivel familiar, una cierta incomodidad, no se cuenta esta revelación y ya, que simple para el mundo en su aceptación, sino que se empiezan a mostrar estas tensiones que empiezan a aparecer, el presentar a la pareja, cómo lo van a ver mis papás, en esa incomodidad que estamos encontrándonos con este hijo que ahora estamos conociendo, o que por primera vez nos volvimos a mirar nuevamente, lo reconocemos.
La semana pasada entrevisté a Patricio González, director de la teleserie, y él me comentaba que se quiso mostrar la realidad de lo que pasa generalmente en una familia cuando se recibe una noticia así, que no es aceptar todo inmediatamente y con total normalidad como se pretende demostrar para fuera de ella.
Claro, está el discurso al principio, el discurso de aceptación, del ‘estamos contigo’, pero viene la realidad que es cuando me encuentro con el otro ser humano y todavía hay en mi sistema de creencias un rechazo. Yo creo ver diferente allá fuera pero en realidad son mis propios miedos los que se están mostrando, entonces aparecen todos esos miedos y tensiones familiares, esos pensamientos también desde un grado machista, sobre todo la tensión con mi abuelo en un principio, con mi primo, el más adolescente, el hijo de mi tío José Luis que declaró abiertamente su homofobia. Empiezan a existir todas esas tensiones y esos matices.
¿Cómo se va a ir desarrollando la historia de Matías? ¿Cuáles serán sus dificultades a futuro?
Ahí viene la parte peak. Yo le acabo de contar a mi tío (José Luis) que los quiero denunciar y necesito que él me ayude porque eso es clave, va a poner en jaque la situación de mi tío que todavía permanece oculta. Decide apoyar a Matías pero ahí viene toda la tensión de con quién se va a encontrar, con qué agresores son, qué tipos son y ahí se viene un nuevo conflicto que en el fondo estos agresores podrían cambiar la situación y el ánimo de Matías en esta acusación hacía tribunales.
Ignacio, para ti, personalmente, ¿cómo ha sido trabajar este personaje?
Para mí ha sido lindo en el sentido de poder mostrar la verdad, lo que me mueve a mí como actor, lo que me contagia. En este caso toca la particularidad que es la de revelar una homosexualidad, pero finalmente la gente que se identifica o empatiza con el personaje también lo hace desde un lugar, donde dice ‘wow, yo no he podido revelar mi propia verdad o abrir mi propio canal de comunicación y soltar lo que siento, soltando todos mis miedos, soltando mi sistema de creencias y abrirme a la felicidad, ser quien soy’. Entonces eso ha sido súper lindo, el trabajar desde un lugar súper universal y personal que me impacta incluso como ser humano.
Ustedes ya terminaron de grabar, está todo finiquitado, al ver cómo la gente ha recibido a tu personaje, ¿cómo siguen los nervios o la ansiedad?
Estoy contento y con mucha ansiedad porque estoy recién encontrándome con esto que es la recepción de la gente, los comentarios que en lo particular me gusta contestarlos uno por uno, e ir viéndolos. Me gusta aprender de eso también, abrirme a la posibilidad de aprender qué es lo que vive el otro para yo seguir comunicándome con mis fuentes, que soy yo, me sirve como aprendizaje. Entonces es un momento súper lindo, de mucha ansiedad, mucho movimiento y decantando la información, viendo las escenas que no había podido ver, que se habían grabado no más, se grabó toda la teleserie.