Durante la mañana de este domingo en la edición matinal de «Meganoticias», Rodrigo Sepúlveda se comunicó a través de un despacho en vivo con la reconocida periodista, que relató con detalle una compleja situación que le tocó vivir mientras se encuentra cubriendo el conflicto bélico en Europa del Este.
Los problemas comenzaron en la jornada de este sábado, cuando Paulina de Allende-Salazar y el equipo de prensa que la acompaña en su labor de informar respecto a lo que pasa en Ucrania, fueron detenidos por más de una hora en la ciudad de Yitomir.
En diálogo con el noticiario de Mega, la reportera contó lo ocurrido. «Fuimos detenidos por alrededor de una hora y media. Interrogados, fotografiados. La historia es larga, es compleja, es mejor protegernos que estar exhibiéndonos con las cámaras», advirtió.
«Estamos bien, estamos sanos, las imágenes se las voy a mostrar, porque pudimos tomar imágenes de esta detención, que voy a llamar detención», detalló con nerviosismo, agregando que los policías «nos detienen, nos piden documentos, nos apuntan, nos hacen esperar y nos llevan a un lugar».
Según el relato de Allende-Salazar, alcanzó a asustarse debido a que los llevaron a un sitio que «no era como una comisaría chiquitita, que uno conoce acá de Carabineros, sino que a una sala muy bien establecida, muy firme, con estas ventanas que uno puede ver de un lado pero no del otro».
«Nos fotografiaron de lado y de frente, y nos revisaron todo el material que teníamos… Es probable que si hubiesen visto esas imágenes, la historia sería distinta», aseguró, añadiendo que incluso pudo ver a un «periodista español que está absolutamente incomunicado, y la información que tenemos es que no estaba haciendo nada más que transmitir información de lo que estaba ocurriendo en terreno».
Luego de que Sepúlveda asegurar al público que «Paulina y su equipo están bien», su colega desde Ucrania se despidió manifestando que existe «mucho resquemor del trabajo de la prensa, no sé si porque piensan que podemos ser saboteadores, o porque quieren restringir lo que informemos».