Los actuales días de Mariana Derderian han sido un camino y un viaje de constantes aprendizajes. Y es que el año 2024, según sus propias palabras, fue el peor en su vida. No es de extrañar: en mayo y a causa de un incendio en su hogar, sufrió la experiencia más terrible que puede llegar a enfrentar cualquier persona, como lo es la muerte de un hijo.
Desde entonces, la querida actriz ha estado realizando un trabajo interno para reflexionar acerca de la existencia. Un viaje personal por el que ha llegando a interesantes conclusiones, que luego comparte con sus seguidores en redes sociales. Gracias a ello, el mundo ha podido enterarse de su tremenda resiliencia para sobreponerse al dolor y salir fortalecida, a pesar del dramático episodio que debió soportar.
Pero ahora, el viaje de Mariana Derderian es literal. Al estilo de la protagonista de la película “Wild”, protagonizada por Reese Witherspoon, Mariana decidió dejar su casa por unos días, y solo con una mochila a cuestas, partió a recorrer diferentes lugares del sur del país.
Lo contó ella misma en su cuenta de Instagram. “¿Viajar sola? Me encanta! Esta vez fui al sur, a meditar, a conectarme, a ver y escuchar pajaritos, a perderme y a encontrarme… Y ocurrió”, dijo en un mensaje.
El lujo de viajar sola
Junto a una serie de imágenes en las que mostró lo que ha sido su recorrido hasta el momento, la intérprete de teleseries como “Mamá Mechona”, continuó compartiendo sus pensamientos expresando que “la naturaleza siempre sana”.
“Encontré mucho dentro de mí. Encontré certezas, respuestas, dudas, contradicciones y tanto más. Me fui en una carpa de techo que me prestaron (ojalá fuera mía) y la aventura empezó. La libertad de ir, de hacer, de andar, de recorrer y cambiar cuantas veces quiera, poder moverse cómodamente y dormir a pata suelta como una reina”, meditó Mariana Derderian.
Y llegó a la conclusión de que “viajar sola es un lujo”.
“Te permite dejar de evadir, encontrarte con tus propios demonios, observarlos para dejar de sabotearnos nuestra propia vida, vernos de afuera a nosotros y a nuestro entorno. Desafiarnos, llorar y reír. Ver con claridad quiénes son las personas de verdad, las que realmente valen, las definitivas y las transitorias”, continuó explicando Mariana Derderian sobre la experiencia vivida.
Un viaje literalmente de sanación para iluminar la vida de la actriz tras la pérdida del pequeño Pedro.