“El JC que le dicen” está viviendo su mejor momento mediático en plena era COVID. Un matinal y un late en TV abierta y otro en el cable, un exitoso programa vespertino en la Radio Bio-Bio y un potente Canal de YouTube lo tienen como el personaje del momento en los medios.
Definitivamente Julio César Rodríguez la lleva. El hijo ilustre de Hualpén se ha transformado en el rostro más importante de la TV chilena en la era Estallido Social-COVID. Su desempeño como conductor de “Contigo en la Mañana” junto a Monserrat Álvarez, donde se ha dado el justo de echar la talla, indignarse, reír y atrincar con gracia y clase a las autoridades de los más diversos puestos y tendencias política. Su combinación de preparación rigurosa, picardía callejera y empatía ha rendido frutos prodigiosos.
Sin embargo, no se ha conformado con eso. Actualmente tiene dos late shows paralelamente al aire: al eterno “Síganme los Buenos” del canal de cable Vive! se sumó “Pero Con Respeto” en Chilevisión, en el cual realiza entrevistas sumamente agradables y entretenidas a personajes de la actualidad. Además, mantiene su rol de conductor del programa vespertino de Radio Bio-Bio “Podría Ser Peor”, siendo actualmente puntal y voz ancla de la programación de la emisora de la familia Mosciatti. La cereza de esta contundente torta mediática es “La Junta”, un Canal de YouTube donde, en una notable muestra de visión de futuro, Julio César sube videos con entrevistas a destacados íconos centennials y millenials como Pablo Chill-E, Kid Tetoon, Gianluca, Tommy Boysen, Kaiser y Marcianeke, en donde ha compartido ideas, historias…y hasta pitos de marihuana en una ocasión. “La Junta” tiene 687 mil suscriptores a la fecha, es decir ya tiene el Botón de Plata de YouTube y va por el de Oro. En los recientes Premios Giga Awards 2021, el periodista ganó el premio a la categoría “Mejor influencer”, y “La Junta” estuvo nominada a “mejor cuenta de YouTube”.
El asunto ha traspasado los márgenes televisivos, y Julio César Rodríguez se ha transformado en un líder de opinión. Medio en broma, medio en serio, fue elevado como posible candidato presidencial por La Cosa Nostra, en especial por su ex compañero de carrera, trabajo y juergas Mirko Macari. Pero no todo ha sido miel sobre hojuelas. Le dio apoyo mediático bastante explícito a “La Lista del Pueblo”, o al menos a algunos personajes ligados a ella, pero se desmarcó de manera bastante notoria de ellos después de que ese grupo cayera patéticamente en desgracia producto de fiascos como los de Rodrigo Rojas Vade y la fallida candidatura presidencial de Diego Ancalao. Eso causó el severo cuestionamiento público de Amaro Gómez-Pablos, que lo interpeló por el tema, generándose un sabroso cruce mediático entre ambos periodistas.
El hijo ilustre de Hualpén y el periodista de acento exageradamente castizo se tienen ganas desde hace rato. En el 2005, en el programa estelar de TVN “Noche de Juegos”, donde Julio César oficiaba de editor periodístico, invitaron a Juan Pablo Flores, posteriormente uno de los fundadores del Club de la Comedia, que en ese momento imitaba a Amaro Gómez-Pablos en un programa humorístico de bajo presupuesto en UCV-TV. Flores presentó una rutina imitando a Amaro, donde festinó con los reporteros de guerra en el Medio Oriente, con alta dosis de humor negro y de doble sentido, por lo que fue cortado inmediatamente. Gómez-Pablos, en ese entonces rostro ancla del noticiero central de TVN, se sintió pasado a llevar, consideró que la rutina había afectado su integridad, imagen y credibilidad., expresó su molestia a al equipo de “Noche de Juegos”, pidiendo entre otras cosas la cabeza del editor periodístico, es decir de Rodríguez, lo que provocó que este último fuera indignado a encarar a Amaro, incluso con ánimo de irse a las manos. Fue una historiada pelea entre las áreas de prensa y entretención de TVN, con amenazas de combos incluidas.
Con todo, Julio César le está sacando el jugo al peculiar y estelar momento mediático que vive. Si se maneja bien, está en perfectas condiciones de ser uno de los rostros claves de la TV chilena post-pandemia. Capacidad ha demostrado de sobra.