Termina 2023 y Kanye West no puede cerrar el año sin protagonizar otro de sus numeritos.
Porque, como si no fueran suficientes sus polémicos comentarios de hace unas semanas en contra de los judíos y en favor del nazismo (“Hitler me cae bien”, dijo, por ejemplo), que le valieron perder multimillonarios contratos comerciales con las marcas Adidas y Balenciaga, o que la sucursal londinense de Madame Tussauds decidiera dejar de exponer su figura de cera al público, resulta que ahora su exagente comercial lleva largo tiempo sin poder localizarlo y considera que está “desaparecido”
El aludido, Thomas St. John, se desempeñó como el principal asesor financiero de West durante 18 meses. Sin embargo, alega que el músico no pagó sus honorarios y por ello lo está demandando. Pero le ha resultado imposible ubicar a West para entregarle los documentos acerca del juicio.
Según The Independent, que intentó obtener declaraciones del representante del rapero, sin éxito, el 19 de diciembre St. John debió pedir más tiempo a la corte para hacer llegar la documentación con la demanda a West, dados sus infructuosos intentos para dar con su paradero.
El exempleado y sus asesores legales además han tenido dificultades para comunicarse con los abogados del artista y empresario también conocido como Ye.
“En consecuencia, no hemos podido notificar a los acusados a través de su defensa. En general, hemos tenido dificultades para confirmar la mejor dirección actual de Kanye West”, señala hecha llegar al juzgado solicitando extender el plazo para la notificación.
Así las cosas, el mundo comienza a preguntarse… ¿dónde diablos está Kanye West?