El humor de esta noche cumplió lo prometido: Fusión Humor triunfa con contingente rutina llena de contenido social. Sin embargo, un abrupto corte por llegar al límite de tiempo, enfureció al monstruo que no dejó de pifiar ni siquiera en la competencia.
La rutina incluyó una mención a Tiro de Gracia, como un mini homenaje ante el hecho de que no pudieran presentarse en la obertura programada y ensayada para el día domingo 23 a causa de los graves disturbios que se vivieron en el Hotel O’Higgins, lugar donde se alojaba la banda y parte de los bailarines.
«Esperamos diez años para estar en Viña y se da justo en el estallido social. Es una edición que va a marcar la historia del festival», expresaron en su conferencia de prensa los cuatro muchachos.
«Claramente, el estallido social nos marca a todos un precedente, pero previo ya veníamos evolucionando y sintiendo que había cosas que ya no correspondían. Todo el público merece el respeto y la entrega desde esos mismo cambios», agregó Rulo.
El problema surgió cuando, luego de entregarles los galardones, fueron despedidos súbitamente del escenario. Fue ahí cuando el monstruo despertó fuerte y claro, pifieando a María Luisa Godoy y Martín Cárcamo cada vez que aparecieron y durante toda la competencia, a tal punto que los animadores tuvieron que dar explicaciones.
El descontrol fue tal que debieron irse a una pausa comercial. De hecho, se incluyó a Pancho Saavedra y Karen Doggenweiler en el backstage, pese a ser jurados, pero a la vuelta siguieron las pifias, las que duraron hasta el momento de anunciar a Luciano Pereyra.
A pesar de lo sorpresivo del corte, en la conferencia de prensa post show, Fusión Humor aclaró que éste se debió a que alcanzaron su límite de tiempo y que no fue censura.