En un nuevo capítulo de “La Divina Comida” quedó al descubierto el fuerte relato de Nicolás Solabarrieta sobre las adicciones de su padre, Fernando Solabarrieta.
El exfutbolista abrió su corazón tras la pregunta del abogado Claudio Rojas, quien le consultó cómo han enfrentado este tema en la familia.
“Siempre ha sido un tema muy difícil. Lleva muchos años siendo parte de nuestra familia”, partió mencionando el también hijo de Ivette Vergara.
«Con los años, uno va entendiendo que el tema de las adicciones es una enfermedad, es como un cáncer, es como un aneurisma, no es algo que la persona realmente quiera hacer», agregó.
En ese sentido, Nicolás Solabarrieta destacó en “La Divina Comida” que, de alguna manera, le tocó acompañar a sus hermanos menores: Iñaki y Maite.
«Quizás desde muy chico me tocó ir asumiendo una posición complicada, porque tenía hermanos chicos», dijo.
El fuerte relato de Nicolás Solabarrieta sobre las adicciones de su padre
Al mismo tiempo, Nicolás Solabarrieta destacó cómo vio a su madre en estos difíciles momentos que enfrentó Fernando Solabarrieta con sus adicciones.
«Hay que entender que mi mamá, obviamente, en muchas situaciones se debe haber sentido un poco sola y necesitaba esa compañía, y yo ser el partner», aseveró.
«Sucede, pasa y no hay que juzgar, sino que simplemente acompañar», sentenció.
En mayo de este año, Fernando Solabarrieta estuvo conversando en “Podemos Hablar” de CHV y ahí ahondó sobre sus adicciones y excesos.
«Yo no me morí de casualidad. Por años coqueteé con excesos, con consumo de algunas sustancias que me permitían anestesiarme», dijo.
«Ese descontrol fue tan grande, tan grande, en el aumento de la frecuencia y de la cantidad, que yo pasé momentos muy duros de tal cantidad de frecuencia y de cantidad de consumo, que honestamente Dios me dejó acá por alguna razón, que yo agradezco, por cierto. Porque en esos momentos, Diana, no es que tú te quieras morir, eso no es así, pero llega un momento que a veces te da un poco lo mismo. Es tal el dolor que estás sintiendo que ya nada te calma y tampoco sabes cuál es el dolor interno”, agregó.