La autora anunció hace algunos días que iniciaría una batalla legal en contra del futbolista y este martes, cumplió con su advertencia. En las últimas horas, Carmen Castillo dio a conocer que la Justicia acogió su demanda en contra de Guillermo Maripán.
La influencer denunció que recibió amenazas de difusión de material de connotación sexual que compartió únicamente con el deportista. Recordemos que ambos tuvieron una suerte de relación a distancia que terminó cuando la «tuitera» quiso volver junto a una ex pareja.
Después de esto, Carmen Castillo acusa recibir mensajes amenazando con hacer público el material íntimo que compartió en la intimidad con Guillermo Maripán. Hace algunos días, la personalidad de redes sociales comunicó que demandaría al defensa del Torino FC. Éste último, por su parte, aseguró que igualmente iniciaría acciones legales por difamación.
Justicia acoge demanda de Carmen Castillo
Durante la jornada de este martes 8 de abril, Carmen Tuitera utilizó su cuenta de Instagram para compartir un documento. Éste corrobora que la Justicia acogió su demanda. En el post que hizo, etiquetó a las cuentas de la red social de la selección chilena, la ANFP y el club deportivo en el que juega el ahora demandado.
“El Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago declaró admisible la querella interpuesta por Carmen Castillo contra el futbolista de la selección nacional, Guillermo Maripán, por los delitos de violación de vida privada, difusión de información personal sin el consentimiento de la víctima, y exhibición y difusión de registro de imágenes íntimas de connotación sexual”.
Según constituye la misiva: «Estos delitos se enmarcan en un contexto de violencia de género, específicamente bajo la Ley 21.675″. Ésta tipifica «como forma de violencia de género la violencia simbólica, entendida como la comunicación o difusión de imágenes, sonidos o textos por cualquier medio de comunicación sin el consentimiento de la afectada».
Para cerrar, Francisca Millán, socia abogada de AML Defensa de Mujeres hizo hincapié en que «la difusión no consensuada de material íntimo es una grave vulneración de los derechos de las mujeres y está penada por la Ley».
