De forma anual, el grupo británico de medios William Reed Business Media, especializado en el sector alimentos y bebidas, elabora un ranking con los 50 Mejores Restaurantes del Mundo (The World’s 50 Best Restaurants) y hoy, uno chileno, figura entre ellos.
Se trata de un listado prestigioso: recoge las opiniones y experiencias de 1.100 expertos internacionales de esta industria, y el proceso de votación está sujeto a la evaluación independiente de la consultora Deloitte.
En ese contexto, justamente los resultados de este año fueron recientemente dados a conocer y arrojaron una excelente noticia para la gastronomía chilena. Boragó, el restorán fundado en Vitacura hace 18 años por el chef nacional Rodolfo Guzmán, se ubicó en el lugar número 23 entre los mejores establecimientos de alta cocina del planeta.
En realidad, la presencia del Boragó en esta recopilación no es una novedad. Año tras año ha estado figurando entre los mejores 50 del mundo. Lo meritorio de esta versión es que escaló varios lugares respecto a 2024, cuando se situó en el puesto 29, alcanzando en esta ocasión su más alta ubicación en el ranking.
Inspirado en la cultura mapuche
En el primer lugar se posicionó el Maido, un restaurante peruano de estilo nikkei dirigido por el chef Mitsuharu «Micha» Tsumura. Con ello se ratificó a la cocina peruana como una de las más sobresalientes a nivel internacional.
En el top 5 le siguen el Asador Etxebarri (España), Quintonil (México), DiverXO (España) y Alchemist (Dinamarca).
Para realizar el listado se consideraron restoranes de 22 países y 32 ciudades. Las evaluaciones no están sujetas a cánones preestablecidos, quedando al criterio y experiencia de los más de mil críticos gastronómicos, cocineros y dueños de establecimientos de todo el mundo que participan en la votación.
Respecto a la propuesta de Boragó, destacaron diversas opiniones elogiosas. Como las «profundas raíces en la cultura mapuche de sus preparaciones». O «inspirado por los cazadores-recolectores indígenas del sur de Chile y Argentina» y dueño de un menú que «muestra la riqueza que Chile ofrece».
«Guzmán se esfuerza por incorporar las plantas autóctonas del país a la vasta despensa del restaurante. Trabaja con más de 200 personas, incluyendo comunidades de recolectores y pequeños productores de todo el país, para ofrecer productos frescos y de temporada», expresa parte de la reseña que acompañó la elección del restaurante chileno como el 23 mejor del mundo.