A la otrora musa del underground chileno, el amor le queda muy bien. Patricia Rivadeneira lo encontró en Italia, cuando se desempeñaba como agregada cultural en dicha nación durante el mandato del presidente Ricardo Lagos.
“Él tenía una serie de amigos y tenía un pasado con Chile, pero yo no lo sabía (…) Nos conocimos por casualidad en una muestra de arte, nos vimos como cuando se mira a la distancia. El se acercó y nos pusimos a conversar”, relató la actriz cuando fue entrevistada hace un tiempo por un programa de La Red.
Ese encuentro llevó a una relación y luego a un matrimonio al que sumaron los hijos de ambos, una temporada de convivencia familiar en Roma y posteriormente un viaje a Chile para asentarse de manera definitiva.
Sin embargo y a pesar de que su exitosa participación en la teleserie “Demente” la llevó a estar dando entrevistas en diversos medios de comunicación, su marido seguía siendo un nombre para la mayoría de la gente: Andrea Orsini aún no había sido presentado ‘en sociedad’… hasta la emisión del último capítulo de “La Divina Comida”
Fue en ese contexto que la intérprete dio a conocer a su pareja, a quien definió como “el amor de su vida” y, para la ocasión, su ayudante en las diversas preparaciones.
“Aquí está el cocinero estrella, Andrea Orsini”. Él es el amor de mi vida. Es mi ratatouille, mi peor es nada, mi pinche de cocina y mi pinche en otras cosas también”, fue el discurso de introducción para presentarlo a los invitados Tutú Vidaurre, Luis Dubó y Félix Soumastre.
Una experiencia que, finalmente, reconoció como entretenida. “Fue bonito tener al marido cerca. Nunca nos habíamos presentado en público. Sin pensarlo y sin quererlo… pero choro”.
