Por belleza, Mayte Rodríguez no se queda atrás. Una genética heredada de sus padres, el ex director de televisión, Óscar Rodríguez, y la actriz Carolina Arregui, quienes otorgaron a la modelo todos los atributos para convertirse en una mujer hermosa desde que era pequeña.
Sus más de un millón de seguidores de Instagram constantemente dan cuenta de ello, dejándole mensajes en los que alaban su estética. “Diosa”, “Maravillosa”, “Una barbie”, “Divina”, son algunos de los adjetivos con los que suelen definir a la joven de actuales 35 años.
Por estos días, la también influencer, vive feliz sus días como madre, etapa en la que se ha preocupado de cuidar su salud física y mental con diversas rutinas, que recientemente no dudó en compartir con sus seguidores.
Por ejemplo, una de las dudas planteadas en un live de preguntas y respuestas fue sobre los cuidados que tuvo con su cuerpo mientras estaba embarazada. “Masaje en los pies, comer naranja, nanai en la guata y dormir lo que más se pueda”, reveló la actriz.
Tampoco faltaron las consultas sobre si se había sometido a retoques estéticos. “Nada todavía”, dijo Mayte Rodríguez. “1oo % natural”, acotó.
Al respecto, confesó que sus secretos de belleza estaban en el uso de buenos productos y una vida sana. “Confío en las buenas cremas, deporte y alimentación. Pero no descarto que algún día quiera hacerme algo”, detalló de manera sincera.
Por siempre el amor propio
Pero no solo de temas físicos consultaron a la modelo. También hubo preguntas sobre sus penas amorosas.
“¿Cuántas veces has sufrido por amor?”, “¿Cómo has logrado salir de eso?” le escribió un seguidor. Ante ello, Mayte Rodríguez respondió con una reflexión respecto de la importancia del amor hacia uno mismo.
“El amor propio y confiar en el destino son la clave para dejar que ocurra lo que deba pasar. Quererte a ti primero para poder querer a otros. Rodearte de personas que te quieran. Abrazar tu soledad y apreciarla”, declaró en el live.
Cabe señalar que Mayte Rodríguez está emparejada con el empresario gastronómico Camilo Figueroa y son padres de Galo, un niño que hoy tiene dos años.
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