Hoy, en su séptimo capítulo, la competencia culinaria más exigente del mundo llegará a niveles insospechados en su versión chilena. Esta vez, los chefs deberán probar su destreza en la cocina bajo presión, pero no en cualquier escenario. El desafío al que se enfrentarán los participantes es cocinar en restaurantes reales para clientes reales.
El desafio conocido como Guerra de restaurantes, tendrá a Juan y Medio y Palacio Danubio Azul como los escenarios escogidos para que los chef, separados en dos equipos, atiendan a distintas mesas haciéndose cargo de todo el proceso y también del salón. Todo esto para cincuenta personas.
¿Y qué pasará? Tanto José Luis Calfucura como Sergio Medel perderán los estribos al verse sobrepasados por las demandas de los comensales e incluso de sus propios dueños, en una prueba en exterior la que estará marcada por la decepcionante performance de los participantes ante el exigente público.