Ahora sí hubo obertura. ¡Y de las mejores! Si bien fue un show serio y no tan “espectacular” como suele ser, el público escuchó y vio con respeto la presentación, marcada por música oriental, ballet, un dúo acrobático y la voz de Verónica Villarroel. Esta última consiguió el triple pack de los premios: antorcha de plata, antorcha de oro y gaviota de plata. Y bien ganado, porque fue realmente a otro nivel.
Luego, Felipe Camiroaga, mucho más relajado que la noche anterior, besó en el cuello a Soledad Onetto, provocando el grito de las mujeres del “monstruo”. La deuda del día anterior quedó saldada.
Juanes fue el encargado de encender a la gente con sus éxitos como “A Dios le pido”, “La Camisa Negra” y “Me Enamora”, entre muchísimos otros. No recordaba que este colombiano tuviera tantos singles populares. Todos cantaron, saltaron, bailaron y corearon sus canciones. Era el favorito del “monstruo”. Por supuesto que se llevó los tres reconocimientos. Fue un show redondito.
La competencia folclórica fue escuchada con respeto. No hubo mayores pifias por el abandono de Juanes del escenario. Sólo se escucharon algunas cuando fue el turno de Argentina con el tema “Bailando con tu sombra, Alelí”. Nada nuevo. La otra participación fue de Chile, con el tema “Cuecas al Sol”, interpretado por la ex Rojo, Camila Méndez.
Luego fue el turno de Fernando Ubiergo. La verdad es que fue inesperado casino lo que ocurrió. La recepción al comienzo fue bastante tibia. En galería muchos sentados y aburridos. Pero al cantar el tercer tema, “El tiempo en las bastillas”, acompañado por “Difuntos Correa”, el público se puso de pie y coreó el tema, que volvió a hacerse popular en las nuevas generaciones gracias a la serie “Los ‘80”. No quería seguir cantando para no retrasar el show, pero el “monstruo” fue más fuerte, así que regresó a cantar un par de temas más. Ahora sí se iba. Todos los instrumentos desconectados. Él no volvía. Los animadores en aprietos. El público quería más. Al final, terminó cantando un tema nuevo sólo acompañado de su guitarra. Las antorchas y la gaviota se quedaron cortas para tal artista.
En la mobile casino competencia internacional se escucharon las canciones de Italia (“La guerra de los treinta años”), Costa Rica (“Dilo de una vez”), España (“Este amor es tuyo”) y Argentina (“Soy tu ángel”). Las cuatro canciones son bastante buenas, pero mis favoritas son la italiana y la de Costa Rica. De hecho, muchos en galería cantaron esta última.
Ya para cerrar la noche fue el turno de KC and The Sunshine Band. Debo reconocer que me reí mucho con el cantante. Y no es que sea comediante, sino que se movía tanto y algo descoordinado con sus bailarinas que no fui el único divertido en galería, sobretodo cuando se cayó. Un grupo de jovencitas estadounidenses estaban felices viendo a su artista. Varias personas habían dejado el lugar, pero los que se quedaron bailaron al ritmo de “Shake your booty” y “That’s the way I like it”, entre otros temas más movidos, y cantaron con “Please don’t go”. Triple pack también para él.
La noche estuvo muy buena. Mucho mejor que la anterior. Se saldaron las cuentas pendientes. Los animadores más relajados y enfrentándose al “monstruo”. Esperemos que esto siga así. Siempre en alza… ¡Se me olvidaba algo! Aún espero el sandwich prometido por Farkas. Estoy indignado.